Fuente: El Mercurio
Tendencia se da en línea con la profesionalización del gobierno corporativo:
Reclutadores y expertos evidencian también una inclinación a tener menos directorios y a una diversificación de perfiles en línea con los desafíos regulatorios, tecnológicos y medioambientales.
Los reclutadores de directores y expertos en gobierno corporativo han observado una tendencia a que los candidatos a directores tengan un mayor cuidado al escoger y aceptar un puesto en un directorio.
Luis Hernán Cubillos, consultor de Egon Zehnder y director ejecutivo del Círculo de Directores del ESE, indica que hay “mucho mayor cuidado y conciencia de parte de los posibles candidatos antes de aceptar un directorio producto de las nuevas regulaciones y especialmente la nueva ley de delitos económicos”.
Este mayor cuidado ha ido en línea con la tendencia a la profesionalización del gobierno corporativo. Cubillos narra que “antes cuando los invitaban a ser director decían ¿dónde firmo? Hoy en día quieren saber mucho más antecedentes de cómo está la empresa, de cómo es el directorio, de cómo se comporta ese directorio y cuáles son las normas de convivencia antes de aceptar esa invitación”.
Pese a esta tendencia, los expertos afirman que aún existe un gran interés por ser director de empresa. En ese sentido, Fadua Gajardo, directora ejecutiva del Instituto de Directores de Chile (IdDC), afirma que el número de personas inscritas en el registro de directores ha continuado aumentando constantemente. En este listado hay 520 directores, de los cuales 156 se incorporaron entre enero de 2023 y febrero de 2024. Gajardo explica que los directores deben renovar su inscripción cada tres años. Todas las personas registradas en 2021 volvieron a inscribirse, dice Gajardo.
El interés por ser director se mantiene, “pero sí hay una intención o una necesidad de los potenciales candidatos de entender cómo la empresa está abordando todas las medidas de compliance”, asevera Bernardita Mena, managing director de Stanton Chase Chile y directora de Stanton Chase en Estados Unidos.
Menos directorios y salida de controladores
La tendencia que si evidencian los expertos es que, en línea con la profesionalización del gobierno corporativo, los directores han disminuido el número de empresas en las que participan.
Cubillos afirma que “antes en Chile era muy normal que una persona tuviera 10 directorios o más, pero las mayores exigencias, y la responsabilidad de lo que significa ser director, el tiempo que hay que dedicarle a conocer la empresa, a sus ejecutivos y los desafíos que tiene, hacen que si quieres ser un buen director no puedes estar sentado en tantos directorios porque no te va a dar el tiempo”.
Por otro lado, también se ha dado en el último tiempo que los accionistas controladores han preferido dejar el rol de director de empresa y poner un representante en las mesas de directorio, indica Gajardo.
Para Cubillos este fenómeno ocurre debido a que los controladores “han llegado a la conclusión de que a veces pueden influir más desde el ámbito más familiar, que desde el ámbito del directorio”. Afirma que esta es una tendencia que se ha dado a nivel mundial, debido a que pueden incidir en última instancia en las juntas de accionistas, en vez de que su opción final sea en la mesa del directorio.
Por otro lado, Mena ve que los movimientos de los controladores también se deben a un recambio generacional, dentro de lo que son los planes de sucesión en las empresas familiares.
Nuevos perfiles
Las mayores exigencias regulatorias, en especial de la ley de delitos económicos, junto con los desafíos en ciberseguridad y transformación digital podrían tener otro efecto en los directorios de cara al cambio en las mesas tras las juntas de accionistas en abril. En específico, los expertos indican que los perfiles de los directores que entran podrían responder a esas nuevas problemáticas.
Gajardo indica que se podría dar la tendencia de incorporar más abogados, o personas con competencias asociadas a una mirada medioambiental, debido a la nueva ley. Cubillos señala que los directores han buscado una diversificación en género, pero también en edad. “Hay un montón de temas donde quizás las generaciones más antiguas se han ido quedando atrás y por lo tanto hay un apetito de traer gente que sea nativa en temas digitales y de tecnología afirma.